domingo, 19 de agosto de 2018

No mires atrás





"Aunque nadie vaya conmigo, yo te seguiré. No mires atrás, no mires atrás".

Vaya una frase bonita y significativa. La recordaré siempre, y la llevaré en mi corazón.

El Señor siempre está ahí, no son pruebas que nuestros seres queridos fallezcan, el Señor no les para la vida retirándoles el aliento, para ponernos a prueba, ni para ver si podemos mantener la fe en Él.

Que nuestros familiares y amigos fallezcan, no es para nosotros una prueba, es porque llegó su momento, y debemos ser humildes aceptando este acto doloroso como parte de la vida del ser humano.

Lo importante es haberles amado, agradecer el tiempo que vivimos con ellos, la oportunidad de haberles conocido y compartido tantas cosas. Por supuesto antes que nada se lo agradecemos a nuestro Señor Jehová, dueño absoluto del espacio, del tiempo, y de todo cuanto existe, Él es el único Ser con derecho a decidir sobre todo lo que existe en el universo, y nadie puede poner en tela de juicio Su derecho a parar o continuar la vida de una persona. En La Biblia están registradas las experiencias de algunos seres humanos a los que se les devolvió el aliento: Lázaro, la hija de Jairo, el hijo de la viuda de Naín, y sin resucitarle pero le alargó la vida fue al rey Ezequías.

Solo está en manos de Dios este acontecimiento.

Nuestra fe no puede faltar por perder a nuestra gente.

Como dice en la película: Has hecho una promesa a Dios, no un trato con Él.

Nuestra fe no la producimos nosotros, como tampoco el amor, todo es dado desde lo más alto, desde los cielos, desde su Santuario, con su misericordia y con su generosidad, para nuestro bien, para que tengamos comunicación con Él, esto nos facilita poder recibir el consuelo en el momento oportuno.

Nunca deberíamos, aunque es verdad que nuestra naturaleza torcida nos hace preguntar: ¿porqué, porqué? y quizás deberíamos preguntarnos: ¿Para qué sucede en mi vida esto, en que me puede servir, y como puedo sobrellevar esta situación Señor?

Pedirle al Señor las fuerzas y el conocimiento de como seguir firme en nuestro recorrido en la vida, para seguir sirviendo conforme a Su Palabra.

No ha hecho saber que Él a pesar de lo dura que pueda ser la situación, siempre estará con nosotros ayudándonos en todo, no que no puedan suceder estas cosas, sino que siempre será nuestro apoyo y nuestro consuelo, nuestro Guía y Maestro divino.

Fue hombre 33 años y medio en la tierra, y en el momento de morir en las puertas de Jerusalén, en la cruz, Dios Hijo aceptó a Jesús de Nazareth, el hombre que tomo vida humana en el vientre de María, para morir por nosotros; entonces, si Él mismo tuvo que hacer que Jesús viviese esa experiencia, que tanto le desagrada, porque Él es la vida que es lo contrario de la muerte, y tuvo que permitir el Padre que el hombre que tenía una vida perfecta sin pecado que es Jesús muriese, llevando a Dios Hijo dentro de su cuerpo en su alma, para reconciliarnos con el Padre, siendo la vida de Jesús sin falta alguna, sin transgresión de ningún tipo, cumpliendo la Ley a rajatabla, y pagando nuestra deuda universal que es la muerte eterna, ¿ cuanto más nosotros que somos pecadores, cometedores de una falta detrás de otra, los que muramos y volvamos al polvo de la tierra pereciendo nuestros pensamientos en ese mismo momento?

No es intención de Dios que padezcamos, fue nuestro error lo que hizo que entrase la muerte en la raza humana. Sin embargo nuestro Creador se comprometió a cumplir la promesa de sacarnos de este laberinto de dolor, para dar a todo el que en Él crea, al que acepta la fe y el regalo de amor de haber pagado nuestra multa espiritual en la cruz, y limpiarnos de nuestra iniquidad, la vida eterna.

Un tiempo sin límite, sin error, sin dolor, donde ya no habrá corrupción ni espiritual, ni psico-emocional ni física-material. Habrá Vida, Justicia, Paz, Belleza, Armonía, un equilibrio absoluto, inter-independencia, Comprensión, el respeto que hoy aún no conocemos, y todas estas cuestiones se llaman: !AMOR!, Su Amor! 

No importa que hoy suframos pérdida de cualquier familiar, amigo, salud, finanzas, lo que importa es aceptar que cada vivencia se debe a un Plan Perfecto, un Propósito divino, reconocer cada instante por duro que sea como un peldaño en nuestra escalera al cielo, que nos acerca más a Dios.

Nos dijo que "quién ama más a su hijo que a mí no es digno de mí", porque esto incumple Su Ley, que por gracia no poner en el corazón nuevo que nos prometió al hacer un Nuevo Pacto, un corazón con su Ley escrita y que Él hace que cumplamos sus Mandamientos. ¿Que más podemos pedir?

¿Cuán más amoroso y comprensivo puede ser nuestro Dios?

Demos gracias por Su Gracia, por el amor con que nos trata, y mirar hacia el cielo, y pedirle que nuestra fe se mantenga firme en nosotros, la fe que Él nos da, sobre todo en las dificultades, que nos gocemos en la aflicción, y entendamos que nuestro camino está guiado por Él con sumo amor.

Que nos de sabiduría como pidió el rey Salomón para dirigir a Israel.

Humildad y mansedumbre para poder seguir a nuestro Camino, que es la Verdad y la Vida, nuestro Señor Cristo Jesús para gloria suya.

Se lo pido y se lo agradezco, para todos y las frases tan estupendas de esta película.

Gracias Señor en el Nombre de Tu Hijo Jesús!. Amén.